Diamante de sal rosa del Himalaya para molinillo (Pakistan)

¡El diamante de sal, joya del Himalaya!

La historia del diamante de sal se remonta a 200 millones de años. La cordillera del Himalaya nació de la colisión de las placas Indoaustraliana y Euroasiática, que provocó la desaparición del océano Thetys que las separaba. La lenta evaporación de las aguas de este océano ha dejado estos cristales de sal de color rosa, ricos en minerales y oligoelementos.

Alejandro Magno fue el primero, alrededor del año 350 a.C., en traer esta preciosa sal desde Cachemira a Europa. En la antigüedad estaba reservado a deidades y emperadores.

Delicadamente extraídos a mano de las minas de Khewra, en el corazón del Himalaya, estos cristales de sal marina fósil, que en realidad llamamos sal de roca, sal de minería o sal terrestre, están libres de cualquier contaminación, sin aditivos y refinados. Por tanto, son 100% asimilados por el organismo. Estas minas están lejos de estar agotadas: ¡contienen 600 millones de toneladas de sal!

Es la sal más pura del mundo.

Su sabor es un poco menos salado que la flor de sal, su estructura es un poco más seca y su sabor neutro combina bien con todo. Su color puede variar del rosa al rojo dependiendo de su contenido en hierro. Sal terrestre, no yodada. Su color y forma son elegantes e impresionantes.

¿Cómo utilizar el bloque de diamante de sal?

Coloca estos diamantes en un “camino de mesa”. Así tus invitados podrán manipularlos como quieran con el rallador. ¡Efectos y originalidad garantizados!