Antes de enumerar algunas de la principales propiedades y beneficios del té negro conviene explicar muy resumidamente en que consiste este tipo de té, a día de hoy el mas consumido en el mundo. El té negro es un té oxidado, a continuación paso a resumir de una manera sucinta en que con
siste este proceso de oxidación:
1º. Las hojas de la Camelia Sinensis se secan deshidratándolas parcialmente.
2º. Estas hojas de té una vez marchitadas parcialmente se enrollan y al hacerlo se rompe la membrana exterior que recubre cada hoja lo que hace que comience el proceso de la oxidación, sirva como ejemplo el de una manzana a la que se le efectúan cortes en la piel.
3º. Las hojas de té se dejan durante 2 horas aproximadamente en una sala con una temperatura, humedad y aireación controladas para que finalice la oxidación óptima. Gracias a este proceso, el té negro adquiere un aroma, sabor y propiedades únicas. Es precisamente este proceso de oxidación el que hace que el té negro contenga un nivel mas alto de teína, ya que esta es directamente proporcional al grado de oxidación que sufra la hoja de té.
El té negro ha quedado algo relegado después de la irrupción en el mercado internacional del té rojo y el té verde, sin embargo, sigue siendo el más clásico de los tés. Además, algunas propiedades del té negro son muy interesantes, concretamente algunas de las propiedades y beneficios del té negro mas destacadas son las siguientes:
Es antioxidante: al igual que otras variedades de té, aunque algo menos que el té verde o el blanco por ejemplo, el té negro tiene una buena concentración de polifenoles, que actúan como protectores contra radicales libres, ayudan a combatir el envejecimiento y también los problemas cardiovasculares.
Es astringente: al tener una buena concentración de teaflavinas, que son los que le otorgan un sabor amargo, es ideal su consumo para combatir la diarrea o la gastritis.
Es diurético: el té negro colabora significativamente con la eliminación de líquidos del organismo.
Es reconfortante y bajo en calorías: el té negro prácticamente no aporta calorías pero sí da sensación de saciedad. Es ideal para reemplazar otras bebidas.
Es estimulante: contiene sustancias activas que actúan sobre el sistema nervioso central. Por tal motivo, es bueno para los desayunos.
Es muy rico en minerales: como calcio, cinc, cromo, magnesio, hierro, potasio o fósforo, entre otros.
Ayuda a prevenir la aparición de caries por su alto contenido en flúor.
Interviene en la no oxidación del colesterol HDL (colesterol bueno)
